Arroz a la española
Elaboración
Este clásico plato de arroz a la española está preparado con arroz jazmín cocido en cebolla, comino, ajo en polvo, chile en polvo, tomate, caldo de pollo y cubierto con cilantro fresco. Es la guarnición perfecta para acompañar tus comidas favoritas.
Paso 1
En un sartén grande, saltea el arroz en aceite, agrega las cebollas y continúa salteando hasta que la cebolla esté tierna.Paso 2
Agrega los ingredientes restantes, excepto el cilantro. Lleva a ebullición, reduce el fuego y cubre.Paso 3
Cocina a fuego lento durante 15 minutos.Paso 4
Retira la cubierta y añade cilantro. Sirve y disfruta.
La fiesta del arroz
Este auténtico arroz al estilo español es un clásico que continúa resistiendo la prueba del tiempo como plato esencial para cualquier ocasión. La belleza de este plato es que es lo suficientemente versátil como para usarse como guarnición, acompañado de carne o pollo e incluso como relleno de un taco o burrito.
Una parte importante de asegurar el éxito de un buen plato de arroz a la española es usar los ingredientes correctos. El arroz jazmín es un arroz de grano largo que, cuando se cocina, libera muy poco almidón y los granos se mantienen separados, lo que lo hace menos parecido al arroz estilo mexicano y más similar a la textura del arroz a la española. Muchas personas confunden los dos, pero si bien ambos se cocinan con tomate y caldo, el arroz mexicano es más compacto en una textura similar a un risotto, mientras que en la receta del arroz español, los granos se mantienen más separados.
Adaptaciones de la receta
Utiliza Arroz Jazmín 100% Integral Carolina® si deseas agregar más ingredientes integrales a tu dieta. Si prefieres los granos integrales, te invitamos a probar otra versión de arroz a la española preparado con arroz integral.
Aunque este plato es naturalmente vegano y vegetariano, puedes agregar pollo desmenuzado, carne de res o cerdo desmenuzado. Pero, si deseas mantenerlo libre de carne y agregar más proteínas, usa lentejas o garbanzos, tofu u otra carne vegetariana. Intercambia el caldo de pollo por caldo de verduras y ¡listo!
Para un plato aún más casero, prepara con tomates frescos picados en lugar de salsa de tomate. En ese caso, solo tienes que cocinar los tomates un poco más para que puedan liberar su propia agua y aportar más de caldo al plato.
