De principio a fin, esta receta se prepara con las técnicas más sencillas de la cocina casera. Y lo que es aún mejor, no resulta en demasiadas horas de limpieza en la cocina, así puedes dedicarte a compartir tiempo con tus seres queridos mientras disfrutan de unos esponjosos cakes con granos y vegetales.
Paso 1
Cocina la mezcla de arroz y quinoa según las instrucciones del paquete.
Paso 2
Coloca en un tazón todos los ingredientes de las tortitas, menos el aceite de oliva. Revuelve hasta conseguir una mezcla homogénea. Sazona al gusto con sal.
Paso 3
Mientras tanto, calienta el aceite a fuego medio en un sartén grande. Moldea la mezcla para los cakes en pequeñas hamburguesas (aproximadamente ¼ de taza de mezcla por cada una). Coloca las tortitas, poco a poco, en el sartén con aceite caliente. Cocina durante aproximadamente 5 minutos por cada lado o hasta que estén doradas. Mantén los pasteles de quinoa calientes mientras fríes los mezcla restante. Puedes hacer tortitas más pequeñas si quieres servirlas como aperitivo.
Paso 4
Para preparar el alioli casero, combina la mayonesa, el ajo asado, la ralladura y el jugo de limón y la pimienta de cayena en el tazón de un procesador de alimentos. Mezcla hasta formar una salsa de consistencia suave. Sazona al gusto con sal y pimienta. Sirve junto a los cakes de quinoa calientes.
Estos pasteles de quinoa, jalapeño y queso tienen una textura esponjosa y un ligero sabor picante que seguramente encantarán a toda la familia. Dale un giro a tus comidas y sirve acompañados de un suave alioli para un almuerzo diferente. Con su esponjoso y sabroso relleno de queso fontina, cebollas verdes en rodajas finas y la combinación de granos de la Mezcla de Arroz Jazmín con Quinoa Carolina®, no hay nada de este plato que no nos encante. Además de deliciosos y divertidos, te garantizamos que es una receta muy abundante para disfrutar entre semana.
Para la mezcla de los cakes solo debes combinar los ingredientes de la lista y cocinar en un sartén con aceite de oliva caliente. Sabrás que están listos cuando la mezcla tome un ligero color dorado. El sabor del aioli casero complementa a la perfección el sabor de las tortitas calientes. Prepáralo con jugo de limón y ajo asado, preferiblemente antes de ponerte en marcha con los pastelitos de arroz.
Este queso de origen italiano tiene un sabor enriquecido con un ligero regusto a nuez y una textura aterciopelada que se funde con facilidad. Por eso es el acompañante perfecto para la receta. Siéntete libre de sustituirlo por cualquier otro queso graso que se derrita tan bien como el fontina.